Más de 9.000 estudiantes transformaron su entorno educativo mediante la resolución pacífica de conflictos

Como una estrategia de prevención que ayude a mitigar los riesgos para que los niños, niñas, adolescentes y jóvenes (NNAJ) no incursionen en actividades delictivas y tengan herramientas para prevenir las violencias, la Alcaldía de Medellín lleva una oferta pedagógica a las instituciones educativas de la ciudad en beneficio de más de 9.000 estudiantes.

Se trata de carruseles, talleres, activaciones artísticas y todo tipo de propuestas pedagógicas que promueven la participación de estudiantes, docentes y padres de familia con las que aprenden a resolver pacíficamente sus conflictos, evitar las violencias y los riesgos de cometer delitos desde la reflexión y el significado de los procesos restaurativos.

“Para la construcción de paz territorial de Medellín es fundamental que los niños, niñas y adolescentes, deconstruyan, desaprendan y desnaturalicen prácticas violentas. Hacemos esto para que los niños construyan relaciones de respeto basadas en el reconocimiento de la diferencia y que ellos mismos estén en la capacidad de generar convivencia para la paz”, apuntó el secretario de la No-Violencia, Luis Eduardo Giraldo.

Este proyecto se enmarca en la comprensión del Acuerdo de Paz y el significado de la verdad, la justicia, la reparación y la no repetición y busca cambios estructurales que permitan la transición de un territorio violento a una ciudad que valore la diferencia, que gestione pacíficamente sus conflictos y repare su tejido social.

Esta iniciativa de prevención de las violencias y el delito con enfoque restaurativo trabaja varios aspectos del desarrollo de las infancias y juventudes mediante la identificación de emociones que desencadenan situaciones problema, con conversaciones sobre la paz territorial y la no violencia y a través de un acercamiento a los derechos y deberes para el buen vivir de los menores, con aplicación de las prácticas restaurativas y la prevención del abuso en NNJA.

“Aprendí que las personas con diferentes problemas, razas y género también pueden convivir. Me gustó mucho cuando tuvimos que escribir nuestros nombres y que nos ayudaran los del otro grupo porque esto nos enseña a convivir entre sí”, dijo la estudiante beneficiada de la Institución Educativa Madre Laura, Lauryn Yepes, en uno de los talleres desarrollados en la comuna 8 – Villa Hermosa.

Con esta apuesta, la Alcaldía de Medellín ha llegado a 11 centros educativos, además de impactar lugares como instituciones de educación superior, jóvenes del Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes y al sector empresarial y social.

Con estos talleres se identifican los niños que luego pasan a los Semilleros de Prevención de las Violencias, que también funcionan como espacios de multiplicación, donde los asistentes comparten experiencias y aprendizajes de su proceso en las instituciones educativas y contextos cercanos, y replican la sana convivencia en contextos escolares, familiares y comunitarios.

Durante 2021, cerca de 3.532 NNAJ de 40 planteles y otros grupos como escuelas de música y grupos juveniles participaron de los semilleros de prevención de las violencias, que certificaron a los 244 más destacados como líderes constructores de paz.