Foto: Ministerio de Comercio, Industria y Turismo
Una jugada del Gobierno Nacional le puede inyectar puro aire a un motor de la economía paisa y antioqueña: la industria de la confección y el calzado. Con el Decreto 1184, firmado por el presidente Gustavo Petro, se le bajó el cobro arancelario a CERO a la importación de telas, hilos, suelas y todos los "huevitos" que necesita esta industria para producir aquí, en nuestra tierra.
La idea, según explican desde el Ministerio de Comercio, es simple: al entrar más baratas las materias primas, a nuestras fábricas se les abarata el costeo de producción. Esto, en plata blanca, significa que podrán hacer productos más baratos y de mejor calidad para competir con lo que llega de otros países, especialmente de aquellos con los que no tenemos tratados de por medio.
La medida no es para siempre, sino que tendrá una vigencia de dos años. Eso sí, cada año le estarán echando ojo para ver cómo va rindiendo y qué impacto tiene en el empleo y el crecimiento del sector. Un sector que no es cualquier cosa: solo el año pasado dio trabajo a 490.000 personas en todo el país, donde Antioquia, y especialmente Medellín, tienen un peso enorme.
En resumen, es una apuesta por fortalecer la producción nacional, desde los talleres grandes hasta los más chiquitos, para que lo hecho en Colombia no se quede atrás.
"La medida busca que nuestras fábricas de ropa y zapatos compitan de tú a tú con lo que viene de afuera."